19 may 2009

De Lengua Me Como Un Taco



Necio y con su vasito de veladora en la mano derecha Guadalupe caminaba coqueto aventando sonrisas a ver quien le regalaba un poquitín de agua para llenar las nubes y lograr una buena llovizna. Su plan era sencillo y sin mucho rodeo: ir de casa en casa durante seis días pidiendo agua para arrojarla al cielo hasta que se juntase la suficiente para que se pudiera precipitar generando una abundante lluvia… y a lo mejor un relámpago o dos, eso ya sería ganancia extra.

El buen Guadalupe ya había logrado llenar poco más de cuarenta y cinco vasos durante su primer día de acopio, los cuales, inmediato de ser adquiridos eran arrojados al cielo exactamente desde un pequeño claro con forma de estrella que había encontrado cerca del camino que iba a la cueva del murciélago blanco, allá por donde comenzaba la sierra. Lamentablemente Lupe aún no lograba realizar con éxito ni un sólo lanzamiento porque el agua se negaba subir más allá de dos metros y terca se resistía a alcanzar el cielo.

Sin embargo esto no fue un impedimento para que el buen Lupe dejará a un lado su empresa, que hubiera alcanzado destellos de eternidad si en una de esas que iba por centésima ves camino al claro estelar no hubiera escuchado una voz tan rasposa y e impertinente que lo llamaba.

-Oye Lupe ¿A dónde vas con ese vaso?

Lupe, volteó rápido y sagaz intentado ubicar el origen de la voz, pero no atinaba a descubrir de donde provenía.

-¿Quién me habla?

Cuestionó imperante, mientras buscaba ansioso a su alrededor quien lo interrumpía en su noble tarea.

-No seas güey así no vas a llenar las nubes…

Insistió la impertinente voz y fue en ese momento cuando Lupe bajó la vista y descubrió como a unos tres metros una florecilla que con lengua soez y sonrisa cruzada de malviviente.

Larga y amarilla, con las hojas mordidas y de semblante macabro la condenada sonreía sardónica ante el asombro del pretencioso buscalluvias.

-Si Lupe no seas tarugo, así no se hacen las cosas hay que ser más abusado… yo te puedo ayudar si tu quieres.

Saliendo de su asombro Lupe recupero el aliento y la forma.

-¿Porqué me hablas, si se supone que la yerba no habla?

-No seas cabrón, yo soy una florecita no pasto cualquiera

-Bueno ¿Porqué hablas flor? Si las flores no hablan

-Pues porque soy una flor muy piocha, pero que te parece si no cuestionas lo que no entiendes y mejor me dices si quieres que te ayude o no, ándale

-Pero tu no me puedes ayudar a llevar agua a las nubes porque no caminas ni tienes manos para cargar

-Pero si serás tan güey Lupito , si yo no voy a cargar nada nomás te voy a decir como le hagas, pero antes me tienes que hacer un favor

-¿Yo a ti en que te podría ayudar?

-Pues mira, como tú sabes las florecitas necesitamos agua para crecer y no morirnos, entonces si tu en lugar de andar aventando agua a lo tarugo me la das a mi, yo puedo crecer tan alto que alcanzaría el cielo y allí podría hablar con las nubes que pasen y pues les cuento que quieres que llueva… a todo esto ¿Para que quieres que llueva?

-Pues porque no me gusta que la tierra este seca, me gusta el olor a tierra mojada y que y que los ríos corran con fuerza y todo eso que hace el agua

-Mira tu que noble me has salido ¿Entonces como ves?

-Pues no se…¿Tú para que quieres llegar al cielo?

-Que te importa tu ayúdame y yo te consigo la lluvia

-¿Pero y si eres extraterretre y quieres llegar hasta allá para ver a tus amigos y regresar con ellos para conquistar la tierra?

La florecita lo miró a los ojos profundamente suspiro y dijo: No mames.

-La verdad es que soy un princesa encantada por un pinche bruja que me convirtió en esta flor rastrera que ves, entonces si tu me echas mucha agua se romperá el maleficio y me convertiré en una hermosa mujer que te pertenecerá y vivirá contigo hasta el fin de los días

-¿Te cai? – dijo Lupe emocionado

- Deveras eres idiota maestro

-Oh!

Para ese entonces Lupe ya comenzaba a temblar por las ganas de seguir con su tarea, una fuerza misteriosa y salvaje recorría sus venas y lo impulsaba a seguir llevando agua al claro de estrella para arrojarla al cielo.

-Ya me tengo que ir flor tengo que hacer que llueva

-¿O sea que no me vas a regar desgraciado?

-Pero es que no sé…

Cada momento que pasaba Lupe se ponía más tenso y comenzaba a sufrir desde cada una de sus fibras porque no podía seguir arrojando agua al cielo, sentía de imperante manera que tenía que ir al claro de estrella.

-Está bien mira la cosa es fácil, soy una pinche flor que lleva aquí toda su perra vida sin poder ir a ningún lado y ya me aburrí, así que quiero crecer hasta alcanzar el cielo momás pa´conocer ¿Cómo ves?

-Híjole no sé

-¡Ándale!

-Pero y si eres extraterrestre y…

-Me lleva la venenosa… ¡que no!

-Mmm no sé

-Sabes qué –dijo tremebunda- ya bailó Bertha, no vuelvo hablar con tarados buena onda, no llega uno a ningún lado, ya no quiero nada

-Ahora yo soy el tonto- dijo Lupe un poco triste

-Me recargo en la pared… eres tan buena gente que rayas en lo bestia y nomás por eso te voy a contar la verdad para que salgas de tu error

-¿Si?

-Sí

-Cierra los ojos

-Ah! Y si mi haces algo

-Pero si ni siquiera puedo caminar idiota ¡cierra los ojos! Ordenó la flor

-Esta bien, pues

-Ahora concéntrate, piensa en tu casa, tu pueblo, los senderos que caminas todos los días, los olores y sobre todo haste una pregunta ¿Deveras hablan las flores?

-No pues no

-¡Quihúbole! Siente lo que te rodea, lo que estás haciendo, siente ese vaso lleno de agua que traes entre las manos, tomaló con fuerza y vacíalo lentamente en tu pecho y piensa en que tan lejos está el claro de estrella…

Y Lupe obedeció paso a paso y el agua recorrió su cuerpo lentamente avanzando certera y sintió que todo lo que lo rodeaba comenzó a derretirse y la voz de la flor a escucharse cada ves más lejana y silenciosa.

El agua humedeció sus ropas y siguió su camino por su estomago y sus piernas y entonces Lupe abrio los ojos: No estaba donde estaba, no había tierra seca, ni vías del tren abandonadas, ni un camino siquiera; todo era penumbra. Tras un pequeño esfuerzo y acostumbrados ya sus ojos a la oscuridad logro descubrir a la distancia una puerta abierta y tras el umbral su tapete de estrella que tanto le gustaba y enseguida la taza de baño con la tapa cerrada y sobre la caja una girasol seco en una botella que aún conservaba algunos pétalos en muy mal estado. Regalo de su abuela Maria Luna al que se había prometido poner agua para que no muriera.


El Texto es de Pablo Rétiz, de Hell´s Kitchen y no hay más que decir

10 comentarios:

NTQVCA dijo...

a mi se me hace que el Lupe era el extraterrestre.

¿Porque no empeñamos en buscar lo que queremos en lugares donde sabemos no hay?

Saludos y gracias.

Unknown dijo...

Me encanto!!! esa flor es la neta!!! y Lupe tiene lo suyo….y cada uno debemos de procurar que esos lugares existan y que las flores lleguen al cielo..porque chingaos no!?

Amarillo dijo...

no entendi pero me gusto el lenguage de la floresilla

Niwatory dijo...

ups era con este m pero lo mismo de arriba XD

MauVenom dijo...

Ok

aquí se escribe.

habrá que pensar en todas las flores pendientes por regar

en las promesas que siguen ahí

no sea que deje de llover y tengamos que ir de casa en casa a juntar vasos de agua.

Bien hecho.

"La florecita lo miró a los ojos profundamente suspiro y dijo: No mames"... eso es una belleza del surrealismo.

la MaLquEridA dijo...

Esta es mi historia,


si te digo como me llamo y te digo como hablo,

me creerás que esta es mi historia?...




jajajaja de locura¡¡¡

Amorexia. dijo...

Maravillosa fábula!, de locos sonrientes sin duda.

Saludos luctuosos.

Kózmica dijo...

Hermoso!

Aveces lo que necesitamos está donde no buscamos y buscamos cosas dónde nunca estarán.

saludos!

Mara Jiménez dijo...

Me encantó el reflejo de esa personalidad pueril, atormentada hasta los sueños, por sus promesas no cumplidas. La flor también es como el alter ego de Lupe, ¿no? Me esperaba cualquier cosa menos ese final. Me voy, que algo quedé de hacer y no me acuerdo qué.

Jo dijo...

Vaya.. creo que uno se complica tanto... buscando las cosas y mira sin querer cuantas flores mi heroina ud. se luce con sus invitados eh?

albricias¡ acá ya va a llover

pd? alex y amarillo son el mismo o es proselitismo... jaja